Representante Legal

miércoles, 14 de noviembre de 2007

Cuando es buena la deuda pública...

Perspectiva Política y algo más...

*Cuando es buena la deuda pública *¿Qué rumbo tomará políticamente nuestro Estado?

Yo considero que toda persona física o moral desde que es económicamente activa sabe o ha experimentado haciendo uso del crédito o lo que es lo mismo, se ha endeudado. Ahora en nuestro tiempo, fin de año fiscal y calendario en Colima, tenemos el tema del momento consistente en el uso del crédito público o lo que es lo mismo el endeudamiento con cargo a las finanzas del Estado o sobre lo que los ciudadanos pagamos o habremos de pagar por concepto de impuestos; nuestro actual Gobernador se contagió del concepto de la famosa bursatilización, que por cierto en otras entidades federativas ya lo han experimentado y por supuesto que con resultados positivos o negativos, dependiendo del buen o mal uso de los ingresos que por tal concepto se obtienen, es así pues como el Lic. Jesús Silverio Cavazos Ceballos pretende vía compromiso de nuestros futuros ingresos por los conceptos del cobro de impuestos a la nómina, así como también por el cobro del holograma anual vehicular, que no es otra cosa más que un impuesto por la tenencia de un vehículo automotor, de la marca o modelo que sea, ande o no ande, valga o no valga, dicho impuesto es como la muerte, llega igual para todos y es por parejo; no recuerdo qué gobernante estatal se sacó de la manga ésta puntada y nos impuso este doble pago por la tenencia de un vehículo, sólo que éste estatal, moderado y parejo, y la otra tenencia o cobro es federal y específico para cada vehículo según su modelo, costo, etc. y opera sólo durante sus primeros diez años de edad; pero volviendo al tema del endeudamiento del Estado, hay que partir de la base y contexto en que se pretende dar, así es distinguido lector, la verdad es que en el mercado financiero existe muchísimo dinero y los inversionistas no tienen muchas formas seguras de invertirlo, por ello han creado el concepto de bursatilización, con lo cual fomentan el comercio y renta del crédito o dinero, pero para el caso concreto de Colima donde nuestro primer mandatario pretende obtener un cuantioso crédito y en consecuencia contraer la respectiva deuda, habrá que decir que en primer lugar el Estado de Colima ya tienen su propia deuda que es de 600 millones cuyo servicio y abono a cuenta debe rondar sobre los cien millones anuales; sin embargo es cierto que nuestra entidad tiene una muy considerable mayor capacidad de endeudamiento y crédito, también es de considerarse los dos entornos que se darán para el caso de que el Gobernador decida ir por más deuda vía bursatilización de los conceptos ya citados con anterioridad, en primer lugar este gobierno contaría con recursos más baratos, eso es verdad, podría pagar la deuda que se tiene en el presente, positivo y verdad también, y le quedaría de liquidez en sus manos de un 66% del crédito obtenido por la citada vía, con lo que podría realizarse muchas obras y servicios a favor de la comunidad colimense, lo que es verdad también. Pero… aquí viene el pero, el actual gobierno es un equipo gobernante formado por jóvenes funcionarios públicos que ni a políticos llegan, muy limitados y de poca visión, y esto es cierto; el actual titular de este gobierno no ha demostrado experiencia, madurez ni eficacia en el ejercicio del presupuesto, sembrando más dudas que respuestas, y esto es verdad también, el actual gobierno sabe que estamos en su último tercio de vigencia y por ello en una fase preelectoral y por supuesto necesita crear un ambiente de bonanza y progreso, que legítimamente no se ha conseguido, pero que se puede aparentar con este dineral, inyectado vía bursatilización del impuesto a la nómina y el impuesto sobre el holograma vehicular anual, y todo es muy cierto, si el actual gobierno ejerce esta capacidad de endeudamiento, lo cual parece que ya lo tiene decidido hacer el ejecutivo, (pues tómese en cuenta que él decide sobre sus diputados priistas y verde, que hacen mayoría parlamentaria) entonces en ese caso el ejecutivo va a secuestrar la capacidad ordinaria de procesar crédito de cada mandatario en su debido turno y aquí los afectados serán los futuros mandatarios estatales que se sucederán por sexenios sólo abonando deuda y servicio de la deuda o más claro, intereses que puntualmente habrán de achicar su presupuesto de egresos dedicando una buena parte anual de dicho presupuesto, al pago del dinero que su antecesor vivillo decidió gastar por adelantado y esto creo yo no es moral, ético, políticamente hablando, bueno, creo yo que como decimos los rancheros “esto es o será una chicanada” y no se vale. Nuestro gobernante debe de sujetarse a los márgenes de maniobra económica ordinarios que le corresponde y a respetar a los mandatarios venideros, sean quienes sean, ¿no cree usted?

¿QUÉ RUMBO POLÍTICO VIENE?

Nadie que se precie de tener un sano juicio pensará que electoralmente tal o cuál candidato, tal o cuál partido tiene un triunfo delineado y menos asegurado, pues cada día es más evidente que el ciudadano está más informado y conciente de lo que pasa o acontece en el quehacer político y partidario, y lo que es peor, la ciudadanía en general ya no cree en los partidos políticos, porque para su sorpresa, éstos organismos públicos que ejercen un presupuesto salido de los impuestos del pueblo y que son entes de interés público, cada día son más pragmáticos, es decir, cada día son menos públicos en lo relativo a su interior donde hacen y deshacen todo lo que no está prohibido en la ley y a veces también lo que está prohibido, pero todo esto que ocurre ya la ciudadanía lo percibe y en cualquier encuesta sobre instituciones o personas lo que siempre aparece con menos credibilidad son los partidos políticos y los políticos, esto no es cualquier cosa y lo que si es o constituye, un claro síntoma de descomposición en el que lo que menos cuenta es el interés ciudadano, porque sobradamente vemos cómo las familias y pequeños grupos copulares en las instituciones citadas, son los mismos de siempre, con los mismos métodos y con los mismos resultados; lo anterior puede provocar la emergencia de líderes ciudadanos sin partido y donde sea verdaderamente el pueblo quien finalmente los apoye en detrimento de éstos institutos que se niegan a la transparencia, honestidad y objetividad, con la debida ética y moralidad política. No nos sorprenda que el pueblo en su generalidad le diga: ¡ya está bueno! a los partidos y que en su desmotivación y apatía, espere o encuentre a los líderes populares que aunque sin experiencia les generen confianza, simpatía y respeto; los partidos políticos actuales, sobre todo los tres más grandes, no deben seguir creyendo que el pueblo es el mismo de siempre, no deben pensar que el pueblo sólo es una siembra a la que hay que cosechar, los partidos tienen que ser honestos, transparentes, humildes y ver en el pueblo a ese gran patrón poderoso al que hay que conquistar ¿cómo? Con la verdad, con la franqueza, con la transparencia y con un trabajo y propuesta en su beneficio a cualquier costo político, el pueblo ya no es menor de edad y puede corresponder con sorpresas en lo político; sino al tiempo.


Gabriel Salgado Aguilar
perspectivapoliticasalgado@hotmail.com

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