Representante Legal

jueves, 12 de julio de 2007

Se fue un General de escuela...

Perspectiva Política y algo más…

*Se fue un General de escuela del PAN *Cómo, quién y hasta cuándo

Con fecha de ayer martes 03 de julio, dejó de existir el ciudadano Ingeniero José A. Ramos Cabra, hombre talentoso, de buena familia, apreciado en la sociedad y muy entrañable para quienes tuvimos el honor de compartir en poco o mucho su amistad. Don Pepe, como era habitual que se le llamara, fue una persona del sistema y desde luego colaborador habitual o funcionario del gobierno; ya a la edad madura por el año 1991, Don Pepe decidió incursionar en la política en la oposición, y así de pronto se convirtió en un General Azul, es decir, del PAN pues, fue nada menos que candidato a Gobernador llevando como adversario al no menos honorable y apreciado, Lic. Carlos de la Madrid, quien a la postre, como era de esperarse, éste salió airoso y Don Pepe siguió como todo panista bien intencionado, trabajando en la manera que él pudo, por nuestro partido el PAN, debo aclarar estimados lectores, que el nivel de participación que tuvo Don Pepe, lo hace merecedor del mote de General en el PAN; y aclaro que fue un General de escuela porque tuvimos y tenemos muchos generales en el PAN, pero que estos se han forjado en la lucha desde ser un simple simpatizante o repartidor de volantes, hasta realizar toda su vida las más diversas actividades en el partido y sus estrellas se las han ganado a través del tiempo y escalando en cada batalla. Ejemplos hay muchos, como Salomón Preciado, Crecensiano R. Anaya, Don David Suárez Guzmán, Don Heliodoro Bayardo, etc. Don Pepe, hombre culto y de sociedad, ingresó al PAN, directamente como nuestro candidato a Gobernador, y de tajo llegó a General, eran tiempos aún difíciles y además en su caso particular tuvo doble mérito, al ser hombre público del propio sistema, se atrevió a venirse con los de enfrente, donde bien sabía que no tenía triunfo alguno posible a su alcance, y lo que sí tenía garantizado, era la probabilidad de enemistarse con el Sector Público (Gobierno-PRI) al cual había servido en su fructífera vida. Doble y loable mérito de un gran ciudadano y gran panista, ojalá la militancia lo recordemos con el agradecimiento y respeto que se merece y sobre todo nuestra jerarquía partidaria sepa valorar y difundir el trabajo de este singular panista. Por cierto, no vimos en su misa bandera alguna del PAN en su féretro, un General que sólo se nos adelantó; vaya, para toda su apreciable familia, el más sentido pésame y deseos de pronta resignación.

Cómo, quién y hasta cuándo

Tratándose de servicios de salud prestados por el Estado, llámese Imss, Issste, SSA, y/o Seguro Popular, es inevitable ver o escuchar la ausencia de eficiencia no sólo en el servicio de revisión, consulta o estudio del paciente, si no que lo más grave: No hay medicamentos y tampoco los equipos en muchas clínicas y hospitales no funcionan debidamente. Pero el equipo más grave que no funciona a menudo, es precisamente el equipo humano y esto sí que es muy grave. ¿Qué puede hacer el ciudadano común frente a la indolencia, a la ineficiencia o frente a su propio desconocimiento de los recursos que podría tomar para ser atendido con el comedimiento y necesidad que como paciente tiene este ciudadano común? ¿Quién, cómo y hasta cuándo nuestros gobiernos podrán sensibilizarse en el sentido de que el sector salud no sólo le falta dinero para operar, para actuar con eficiencia, con calidad o calidez? ¿Cómo seguir pensando que todo el problema del sector salud se reduce a falta de ingresos, si vemos a diario a su propio sindicato y a las propias autoridades administrativas más politizadas y desde luego interesadas primero en sus propios y personales objetivos? ¿Cómo se puede manejar y dar el mismo tratamiento a una secretaría o a un sector salud, que a una secretaría o sector agropecuario? Claro que no es, y no debe ser lo mismo, y vaya que se le da más atención a cualquier otro sector del desarrollo social que al sector salud; porque mire usted, por ejemplo en el sector agrario, hay una infinidad de dependencias e instituciones dizque para apoyar la producción, al campo y al campesino; bueno, hasta una Procuraduría agraria y muchos defensores y /o gestores de oficio hay, ¿y en salud qué hay? Sólo el paciente a su suerte frente a una burocracia y sindicatos omnipotentes que la única alternativa que tiene el ciudadano es aguantar, pero ¿quién, cómo y cuándo redimirá al usuario ciudadano paciente en este sector? Debemos hacer algo. Nuestras autoridades deben hacer mucho.

No hay comentarios: